martes, 27 de octubre de 2015


Una sociedad de aprendizaje no puede ser una sociedad solo de información, para esto era  necesario que los alumnos asimilen todos los conocimientos que les eran transmitidos en las aulas, se necesitaba reflexionar sobre  los conocimientos explicativos, no únicamente escucharlos y hacer todo lo que se pedía ya que era una exigencia de la sociedad, familia y la escuela.
El autor más influyente que ha utilizado el concepto de sociedad post-industrial es sin lugar a dudas, el sociólogo Daniel Bell (1973; 2001). Estos análisis apuntaron, por tanto, a una sociedad cientificada, academizada y centrada en los servicios, a diferencia de la sociedad industrial, caracterizada por el conocimiento experimental, el predominio de los sectores industriales, las actividades manuales y el conflicto entre capital y trabajo. Pero sociedad del conocimiento se refiere al tipo de sociedad que se necesita para competir y tener éxito frente a los cambios económicos y políticos del mundo moderno. Se refiere a la sociedad que está bien educada, y que se basa en el conocimiento de sus ciudadanos para impulsar la innovación, el espíritu empresarial y el dinamismo de su economía.
Actualmente el término se refiere cada vez más en la expansión de la educación. Crece la importancia del conocimiento como recurso económico, lo que conlleva la necesidad de aprender a lo largo de toda la vida.
La educación actualmente no se debe limitar al espacio de cuatro paredes sino que se debe continuar a lo largo de la vida aprendiendo de diferentes contextos, por eso una tarea de las sociedades  del conocimiento será de replantearse las actividades sociales vinculadas a la producción y transmisión del saber.
Para esto se necesita un enfoque que no dejara de lado la formación humana y el acto pedagógico. Desde el enfoque socioformativo las alumnas pueden desarrollar un proyecto ético de vida buscando la realización personal aplicando los valores, ser competentes para enfrentar los retos del contexto pasar de una situación dada a una  esperada considerando el entorno y sus relaciones, ser emprendedoras al iniciar y sacar adelante proyectos que contribuyan a resolver problemas del contexto y trabajar de manera colaborativa utilizando el diálogo, tener una actitud positiva y responsabilidad ante su trabajo en las aulas como futuras docentes.


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